
¿Qué es la magnetometría y cómo se aplica en la ingeniería?
La magnetometría es una técnica esencial en la geofísica que permite estudiar la geología e identificar recursos minerales, como hierro y níquel, mediante el análisis de las variaciones en el campo magnético terrestre.
Este método investiga la respuesta magnética de las rocas y otros materiales presentes en la subsuperficie, proporcionando información valiosa para la exploración mineral y la ingeniería.
¿Qué es la magnetometría?
La magnetometría es una herramienta geofísica que evalúa las anomalias en el campo magnético de la Tierra.
Estas variaciones son causadas por las propiedades magnéticas de las rocas subterráneas, siendo particularmente eficaz en el mapeo de minerales con características magnéticas, como los ferromagnéticos.
El campo magnético de un material está influenciado por su estructura atómica, lo que determina cómo reacciona ante un campo magnético externo.
Existen tres tipos de comportamiento magnético de los materiales:
- Diamagnéticos: al ser sometidos a un campo magnético, estos materiales crean un campo opuesto, que desaparece cuando se elimina el campo externo.
- Paramagnéticos: estos materiales se alinean con el campo magnético externo, pero la magnetización desaparece cuando se retira el campo.
- Ferromagnéticos: cuando se exponen a un campo magnético, estos materiales permanecen magnetizados, incluso después de eliminar el campo externo.
La magnetometría se enfoca especialmente en los minerales ferromagnéticos, como la magnetita, para detectar anomalias y señalar la presencia de depósitos minerales.
¿Cómo funciona la magnetometría?
Durante la ejecución de un levantamiento magnetométrico, se miden las variaciones en el campo magnético terrestre causadas por materiales con propiedades magnéticas específicas.
Estos datos se recogen mediante equipos especializados que pueden montarse en aeronaves, helicópteros, o incluso en vehículos terrestres y drones (VANTs).
En los levantamientos aeromagnetométricos, por ejemplo, la distancia entre las líneas de vuelo puede variar dependiendo del nivel de detalle necesario.
Para áreas grandes o de reconocimiento, el espaciado puede ser de hasta 2 km, mientras que para estudios más detallados, los vuelos pueden realizarse cada 100 a 250 metros.
Tipos de levantamiento magnetométrico
Existen dos tipos principales de levantamiento magnetométrico:
- Levantamientos terrestres: realizados en áreas más pequeñas, son utilizados para explorar objetivos geológicos específicos, con un espaciado entre mediciones que generalmente es de 10 a 100 metros.
- Levantamientos aeromagnetométricos: se realizan desde aeronaves o drones, cubriendo áreas más amplias con mayor eficiencia. La altura de vuelo se mantiene baja para garantizar la precisión de los datos.

Datos recolectados en la magnetometría
Los datos obtenidos en un levantamiento magnetométrico ayudan a mapear y analizar las variaciones magnéticas de la zona investigada. Algunos de los principales productos de estos levantamientos incluyen:
- Amplitud del Señal Analítica (ASA): esencial para mapear los bordes de cuerpos rocosos y identificar fuentes superficiales hasta 500 metros de profundidad.
- Primera Derivada Vertical: utilizada para delimitar estructuras geológicas verticales y evidenciar fuentes más superficiales.
- Campo Magnético Anómalo (CMA): este producto identifica anomalias magnéticas positivas y negativas, que ayudan a los geólogos a determinar áreas de interés para la visita y exploración.
Aplicaciones de la magnetometría en la ingeniería
La magnetometría es una técnica sumamente útil en la ingeniería, especialmente en la prospección mineral. Permite identificar minerales ferromagnéticos, como el hierro y el níquel, y también puede ser aplicada para localizar depósitos de otros minerales metálicos.
Además, puede usarse para mapear estructuras geológicas, como fallas y diques, que son fundamentales en el análisis de terrenos y en la planificación de obras de gran escala.
Este método es eficaz en la exploración de áreas donde el basamento cristalino está dominado por rocas que presentan fuerte magnetización, y puede complementarse con otros métodos geofísicos, como la sísmica o la gravimetría.
¿Cómo contribuye la magnetometría a la ingeniería mineral?
La magnetometría juega un papel fundamental en la localización de recursos minerales y en la evaluación del potencial geológico de una región.
Ayuda a identificar áreas prometedoras para la extracción de minerales, siendo uno de los primeros pasos para el desarrollo de proyectos mineros.
Además, puede ser aplicada en estudios ambientales y geotécnicos, proporcionando información sobre la estabilidad del suelo y los posibles riesgos geológicos, como fallas y deslizamientos.
Magnetometría y su relevancia para la exploración mineral
Aunque la magnetometría se asocia principalmente con la prospección de minerales ferromagnéticos, como hierro, níquel y cobalto, también puede aplicarse en regiones con minerales no ferromagnéticos.
El secreto radica en entender el contexto geológico de la zona, lo que permite ajustar el método y maximizar los resultados del levantamiento.
Conclusión
La magnetometría es una herramienta poderosa para la ingeniería y la geología, permitiendo una exploración eficaz de recursos minerales y un estudio profundo de estructuras geológicas.
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